Faltan cosas por terminarse, este pobre año que le queda menos de un mes como le diría Mafalda a un calendario de esos a los que les arrancas hoja por hoja conforme pasan los días -pobre de ti, lo único que haces es comer tiempo y cada vez estas más flaco-.
Ya estamos en esa época del año en la que nada más esperas sentadito a que pasen los días. Se acaba el año y las expectativas que teniamos de él, ahora vienen nuevas y mejores cosas por hacer, si es que las puedes llegar a hacer. Por ahora yo sólo estoy esperando que pasen 10 minutos para salir de mi jornada laboral, mañana esperare dos horas para que empiecen mis vacaciones invernales, y la próxima semana esperare que llegue el sábado para que se acabe el año.
Muchas cosas por hacer, y tan poquito año que nos queda y cómo siempre todo lo dejamos para la última hora, las tareas, los ensayos mañaneros, las declaraciones amorosas, los secretos inconfesables, todo ello siempre con la esperanza de llegar a una crisis donde lo tengas que decir o hacer a la fuerza, sin más opción.
En breve... el recuento del 2010. por ahora ya pasaron esos 10 min.
1 comentario:
aY! Tan identificado me he sentido que casi me ha hecho daño!
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