Típico viernes en la noche, diez personas con gargantas sedientas, dos taxis, un sólo departamento, una sola misión: divertirse a costa de lo que sea, si es necesario destruir cactus a diestra y siniestra, lo harán.
Resultados de la misión:
-Agotar a los dos únicos hombres que sabían bailar.
-Recibir pisotones de los otros dos que no sabían hacerlo.
-La muerte parcial de dos personitas en un slam colectivo (de ocho personas).
-La ceguera parcial de otra persona participante de un baile colectivo imitando un concierto de Rock.
-Derrame de tequilas al por mayor con un solo movimiento de caderas.
-Las mejores canciones incompletas al estar todos sobrios.
-Un juego en el que todos perdimos y paradógicamente ganamos una embriaguez somnífera.
-La peor paliza para nuestras neuronas, se atrofiaron las pocas que quedaban en los cerebros humanistas, con sinapsis incompletas, olvidamos hasta lo más esencial.
-Otro juego en el que todos nos agarramos todo, nos besamos todo, nos vimos todo.
-Miradas más lascivas de lo común.
-Manoseos innecesarios, que las canciones ameritaban.
-Lenguaje más que vulgar, y enterarme de que Janis y yo somos más porno de lo que creíamos.
-Una buena ronda de chistes.
-Una botella de tequila completamente vacía.
-Las mejores canciones completas al estar todos embriagados.
-Terminar todos con un sueño tremendo y con un silencio sepulcral después de semejantes actividades mas que confiansudas.
-Entre otras bellas y finas cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario