miércoles, 16 de noviembre de 2011

Hoy mi mejor amigo.

El del 2007: sólo un abrazo sorpresivo.

El del 2008: un Dios carismático que brincaba de emoción.


El del 2009: una canción favorita en español, con dedicatoria especial.


El del 2010: un disco que escuchabas en tu walkman mientras ibas de camino a la escuela.